Día martes, Lucas 2. Reflexión compartida por Hno. Lorenzo en Capilla SEBIME.
13 Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían:
14 ¡Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres! (RV60)
¡Qué palabra tan mas desafiante! Quisiera detenerme en la expresión repentinamente; que enseñanza tan mas profunda es esta, pues marca una directriz en cómo debiera ser nuestra adoración a nuestro salvador, en todo tiempo, es decir, cuando uno se dispone a adorar en nuestras iglesias semana tras semana, pero también la adoración a Dios irrumpirá nuestra vida diaria, ya sea en el trabajo o escuela, y que tal adoración reconozca la Gloria de Dios que ha traído paz en la tierra y me gusta mucho la expresión utilizada en la versión NTV: "paz en la tierra para aquellos en quienes Dios se complace".
Me despido solo con un par de preguntas reflexiva. ¿Se estará complaciendo Dios con mi actuar y forma de vivir? ¿Si la paz esta alejada de mi, no será acaso un indicador que Dios no se está complaciendo de nosotros?
Hasta mañana. Ricas bendiciones.
Daniel Medina G.
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